Diferencia entre superlativo y comparativo en el lenguaje español

La principal diferencia que existe entre superlativo y comparativo radica en que al hablar del superlativo nos referimos al que es el mayor o menor de algo. Mientras el comparativo es poner frente a frente dos cosas, para notar sus diferencias.

Ambos son para describir y hacer una comparación entre adjetivos de frases. Saber utilizarlos en la situación correcta es esencial, para poder entender en que momento debemos usarlos y la utilidad que tienen.

Conoce la diferencia entre superlativo y comparativo

Ambos te permitirán poner frente a frente dos objetos o más cosas, personas, pero la intención es totalmente diferente.

¿Cuándo hablamos en superlativo?

Al hablar de manera superlativa es referirse al más o el menos de algo. Estamos hablando de los extremos, el que menos tiene de algo o el que más tiene de algo. Los términos medios quedan fuera de la oración.

Por poner un ejemplo, estaremos hablando que esa mujer es la más bella del mundo. O ese carro es el más rápido del planeta. Y por supuesto, el universo como el misterio más grande para el ser humano.

Hay que tomar en cuenta que esto puede ser objetivo o subjetivo. Objetivo cuando conocemos los datos concretos, pero también suele ser dicho por la persona para definir algunas obras, cosas u objetos basado en su experiencia, sin importar si es objetivo.

¿Y cuando hablamos en comparativo?

Para poder hacer el comparativo tenemos que precisamente dos cosas al menos, destacando sus diferencias entre ambos. Pueden haber muchas frases comparando distintos aspectos, tantos como podemos sacar.

Por ejemplo, en la comparación entre dos hermanos podemos decir que Raúl es más alto que Carlos. O que el automóvil A es mucho más rápido que B. Como ves, es necesario tener al menos un punto para comparar.

Las comparaciones son muy utilizadas para elegir algo que comprar, a quien hablarle, que llevar, que usar. Aunque no nos demos cuenta, todo el tiempo estamos comparando todo tipo de cosas y situaciones.

En conclusión:

Ambos son herramientas importantes del lenguaje y para uso diario. En donde podemos hablar superlativamente de ciertas cosas, ya sea para demostrar nuestro gusto por ello o para impactar con nuestras palabras y se entienda es lo máximo de su categoría.

Mientras que las comparaciones nos permiten conocer diferencias y similitudes. Esto sobre todo es utilizado para tener poder de elección antes de comprar algo, elegir un camino y distintas situaciones.